Todo el mundo está hablando acerca del metaverso, pero no hace falta escuchar con mucha atención para darse cuenta de que pareciera que todo el mundo tiene su propia idea acerca de lo que será el metaverso. La única cosa sobre la cual las personas están de acuerdo es que vendrá y revolucionará el internet. El tren ya salio de la estación e incluso las tradicionales casas de corretaje (brokers) ahora ofrecen un ETF del metaverso o más.
Echemos un vistazo a esta emergente tecnología y veamos si podemos separar la realidad de la especulación, los hechos de la exageración. ¿Qué es el metaverso? Sigue leyendo.
Múltiples capas
Los informáticos consideran que el internet actual tiene múltiples capas. Las capas inferiores gobiernan la transmisión de bytes de información a lo largo de la red. Las capas superiores son implementadas por navegadores y aplicaciones que presentan la información y le permiten a los usuarios interactuar con ella.
El metaverso también estará compuesto de capas.
Un amplio consenso ha surgido acerca de la capa de presentación. Esperamos que la interfaz del usuario luzca menos como una ventana de navegador llena de texto y gráficos informativos y más como un videojuego. No desplegamos menús o hacemos clic en atajos para visitar distintos sitios o distintos servicios. En cambio avatares personalizados (nuestras imágenes en la pantalla) caminarán o volarán o se tele transportarán de un lugar a otro en este mundo visual lleno de bibliotecas, quioscos, bancos, salas de conciertos y centros comerciales. Montones y montones de centros comerciales.
Para tener una vista previa acerca de cómo todo esto lucirá en tu pantalla visita Decentraland, The Sandbox o Minecraft. Estos juegos esta repletos de espacios virtuales donde tu avatar puede interactuar con otros usuarios y realizar compras electrónicas.
No es un gran desafío crear un metaverso de niveles superiores. Docenas de videojuegos ya brindan las funciones básicas.
La interfaz de usuario en 3D sirve como una definición de metaverso para muchas personas. Pero agregar una cara bonita a sitios web o plataformas de redes sociales no brinda todos los beneficios del metaverso.
Para que el metaverso sea una plataforma verdaderamente transformadora las cosas deben cambiar en niveles más profundos. Cada espacio virtual en el metaverso debe presentar tu avatar del mismo modo. Cada uno debe permitirte comprar y recoger artículos y llevarlos contigo a otros espacios. Debería haber un solo inicio de sesión cuando entras al metaverso y no diferentes procedimientos de ingreso por cada negocio en el mundo virtual. La moneda que uses en línea debería ser aceptada universalmente o invisible y convertida automática para que no tengas que saltar de vuelta al viejo mundo del internet para cambiar los fondos en la página web de un banco.
Para que el metaverso cumple su promesa cada elemento debe seguir un conjunto de protocolos de forma consistente, del mismo modo que todos los sitios web actualmente se guían por protocolos que definen la transmisión y visualización de información en internet. Así es como definimos «metaverso».
De acuerdo a ese estándar, proyectos como el metaverso de Facebook y el metaverso de Epic Games se quedan cortos para prometer un verdadero metaverso, que signifique una plataforma abierta con protocolos estándar, no un jardín con vallas que existe para el beneficio de una corporación.
Transformación digital
Supón que estás planeando mudarte a una nueva ciudad. El internet de hoy en día te permite preparar la mudanza en línea.
- Utilizas un prestigioso sitio web para localizar un agente de inmobiliario local que te pueda ayudar a conseguir una casa para comprar.
- Vas a tu aplicación de correo electrónico para presentarte y asegurar la ayuda del agente.
- El agente te redirige a la página web de la agencia para completar un formulario sobre tus necesidades y presupuesto.
- Utilizas tu aplicación del banco para recopilar la información financiera para el cuestionario de la agencia.
- Consultas un servicio de anuncios en línea para revisar casas en tu rango de precios.
- Identificas algunos candidatos probables y copias los URLs en tú email para que puedas preguntarle su opinión a tu pareja.
- Mientras tanto pegas la dirección en una aplicación de mapas para ver si las casas que te gustan están a poca distancia de las escuelas.
- Anotas los nombres de las escuelas para luego poder tipearlas en un servicio de clasificación y ver que tal se desempeñan en pruebas estandarizadas y otras mediciones.
El hecho de que puedas completar todas esas tareas de forma online es sin duda un milagro de la vida moderna. Pero es un proceso engorroso y tedioso que involucra pegar información y direcciones web en una serie de 6 o 7 servicios y aplicaciones, cada una con una diferente interfaz y procedimiento de registro para sus usuarios.
¿No sería genial si las páginas web y aplicaciones pudieran interoperar sin problemas? ¿Sin tanto copiar y pegar e información incompatible?
Esa es la promesa del metaverso.
¿Qué tiene que ver eso con las blockchains?
Hay tres formas principales en que la tecnología blockchain puede jugar un papel importante en un metaverso mundial.
En primer lugar, el metaverso podría incorporar tecnología blockchain como un servicio de capa inferior para asegurar que el consenso emergente sea realmente descentralizado. Sin tal descentralización el metaverso es probable que sea implementado como jardines con vallas y que sean incompatibles. Visitarás el metaverso de Google o el metaverso de Apple o el metaverso de Meta. Las tres compañías están persiguiendo este objetivo tan rápido como puedan. La interoperabilidad requerirá protocolos y descentralización que podría limitar a las compañías tecnológicas a que obtuvieran las ganancias a las que están acostumbradas. Pero la interoperabilidad es esencial para que el metaverso alcance todo su potencial.
En segundo lugar el metaverso necesitará una moneda mundial, libre de complicaciones. No tiene que ser Bitcoin ni Ether, pero si tiene sentido que sea una criptomoneda basada en la blockchain. Cada sitio de comercio electrónico querrá instalarse en el metaverso. El intercambio de monedas y las regulaciones de tarjetas de crédito se interponen en el camino del futuro interoperable. El metaverso podría utilizar múltiples monedas, pero la conversión debe ser automática, invisible e instantánea.
Finalmente, el mundo de la blockchain ofrece una clara solución para las preguntas de personalización y propiedad. Quizás visitas una tienda virtual para personalizar tu avatar o decorar tu casa en el metaverso. Necesitarás una forma de establecer la propiedad de ese ítem digital que acabas de comprar, y justamente para eso es que existen los tokens no fungibles. Los NFTs de hoy en día podrían servir como un complemento tecnológico para abordar una serie de necesidades técnicas del metaverso.
Entre los más entusiastas partidarios de los metaversos basados en juegos es el rapero Snoop Dogg, que creó una versión de su mansión del mundo real en The Sandbox para que los usuarios puedan visitarla. Los usuarios podrán hacer un tour por la mansión del artista e interactuar con representaciones visuales de las mascotas, coches, estatuas, mobiliario y mucho más, todos creados como NFTs. También pueden dentro del la Dogghouse virtual comprar billetes para conciertos, incluyendo pases de acceso VIP. Los usuarios que adquieran NFTs de la marca Snoop pueden usarlos fuera de la porción del mundo de Snoop Dogg en The Sandbox.
La Dogghouse de Snoop nos da una idea de como podría lucir el metaverso. Pero, porque está solo disponible para usuarios The Sandbox no es el metaverso. Para que el metaverso tenga éxito debe tener estar universalmente disponible, interoperable e integrado.
El pasado es el prólogo
Nadie ha imaginado por completo como lucirá el metaverso. Es muy pronto todavía. Pero, es razonable pensar que podría brindar el atractivo caso de uso que la tecnología de realidad aumentada ha buscado por años. Reconocimiento de voz está sobre la mesa. Y la traducción inmediata y automática.
Algunas de las innovaciones del metaverso podrían terminar siendo ineficiencias que distraigan. Hoy en día puedes pedir una pizza al visitar el sitio web y haciendo clic en los botones un par de veces. Los que sueñan con el metaverso imaginan una bulliciosa ciudad en donde tu avatar camina a la pizzería y hace la orden con una conversación con el empleado detrás del mostrador. Esto es más entretenido pero menos eficiente. En la medida que el metaverso evoluciona quizás descubramos que hacer un pedido hablando a través de algún asistente como Alexa o Siri sea una mejor manera de alimentar a la familia.
Muchos proyectos comerciales ya están usando la palabra «metaverso» para describir sus ofertas en línea. En la mayoría de los casos todo lo que han hecho en realidad es agregar una interfaz en 3D similar a videojuegos en sus plataformas existentes. Aunque dichas interfaces quizás hagan que las aplicaciones sean más fáciles de usar o más divertidas, en realidad no ofrecen la promesa completa del metaverso, en donde todo el internet es navegable como un conjunto único de información y servicios compatibles.
Para que surja un verdadero metaverso todas las compañías y creadores deben adoptar formas estándar para representar e interactuar entre sí y con objetos en el mundo virtual.
Elementos individuales de la tecnología que se requieren para la implementación del Metaverso 1.0 ya existen. Tenemos la tecnología para crear y navegar vecindarios virtuales con avatares corpóreos. Hemos demostrado la viabilidad del comercio electrónico. Tenemos cascos de realidad virtual para usar en casa cuando disfrutamos de un poco de entretenimiento y gafas electrónicas que sirven como pantallas para aplicaciones que se ejecutan en la computadora que llevamos con nosotros, nuestros teléfonos inteligentes. Los ordenadores, tablets y teléfonos actuales tienen suficiente potencia para manejar las demandas de una capa de interfaz de mundo virtual entre usuarios y aplicaciones. Lo que falta es juntar las piezas.
Una vez que el internet se haya transformado en el metaverso quizás nos demos cuenta que la interfaz visual con estilo de juego es el elemento menos importante. Los investigadores aprenderán del feedback de las primeras implementaciones y para el momento que el metaverso llegue a una audiencia mundial quizás sea muy distinto a lo que imaginamos hoy en día. Solo el tiempo nos dirá si los investigadores logran transformar el internet de una plataforma de trabajo y entretenimiento a un lugar en el que pasaremos felizmente nuestras vidas.
NOTA
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